Alimentos fermentados: ¿Son saludables?
El grupo de alimentos fermentados es muy amplio debido a que existen distintos tipos de fermentaciones. Además de ser deliciosos, los alimentos fermentados ayudan a regular la función intestinal y a fortalecer las defensas.
¿Quieres conocer todos los beneficios que obtendrás al incorporar alimentos fermentados a tu dieta? Te invitamos a leer este artículo.
¿Qué son los alimentos fermentados?
Los alimentos fermentados son aquellos que han sido elaborados mediante la actividad de distintos microorganismos (bacterias, levaduras, hongos) inocuos para la salud humana. La fermentación permite transformar una materia prima (té, frutas, cereales, hortalizas, leche) y modificar su color, textura, composición, aroma y sabor.
Existen 3 tipos de fermentaciones importantes en relación a la producción de alimentos:
• Láctica: los azúcares son convertidos en ácido láctico. Ejemplos de este tipo de fermentación son el yogur, el chucrut, el kimchi, el miso, el tempeh, la salsa de soja, el kéfir, entre tantos otros.
• Alcohólica: los azúcares son transformados en alcohol y dióxido de carbono (gas). La fermentación alcohólica no solo ocurre en la elaboración del vino, de la cerveza, de la kombucha, del sake y de la sidra, sino que también tiene lugar en la preparación del pan.
• Acética: el alcohol es transformado en ácido acético. La fermentación acética ocurre en el vino y en la sidra y es lo que da lugar al vinagre de vino y de manzana, respectivamente.
¿Cuáles son los mejores alimentos fermentados para incorporar a la dieta?
Aunque los alimentos fermentados suelen ser muy aceptados por su agradable sabor, existen algunos que no pueden faltar en una dieta saludable:
Bebidas fermentadas
La mejor bebida fermentada que se puede incorporar es la kombucha, ya que el vino, el sake y la cerveza poseen una mayor graduación alcohólica y deberían consumirse con moderación. La kombucha (té endulzado fermentado) contiene microorganismos beneficiosos para la salud intestinal, fortalece las defensas, contribuye a la detoxificación hepática y retrasa en envejecimiento.
Alimentos fermentados lácteos
En cuanto al grupo de lácteos, los mejores alimentos fermentados son el yogur y el kéfir, ambos alimentos probióticos que, gracias sus bacterias beneficiosas (Lactobacilos y Bifidobacterias), equilibran la flora intestinal y previenen la diarrea asociada con el consumo de antibióticos. Además, tanto el yogur como el kéfir suelen ser bien tolerados por personas intolerantes a la lactosa.
Alimentos fermentados aptos para veganos
Las personas veganas que no consumen lácteos pueden obtener probióticos de diversas preparaciones que consisten en soja fermentada, tales como el miso, el tempeh, el natto y la popular salsa de soja.
El chucrut (col fermentada) y el kimchi coreano (col china o rábano fermentados y fuertemente especiados) también contienen microorganismos beneficiosos para la salud intestinal y del organismo en general.
¿Qué beneficios aportan los alimentos fermentados?
Gran parte de los beneficios de los alimentos fermentados se deben a las bacterias saludables (probióticos) que contienen. Los probióticos ayudan a:
• Equilibrar la microbiota intestinal y prevenir tanto el estreñimiento como la diarrea.
• Prevenir y/o tratar la diarrea asociada a los antibióticos.
• Fortalecer el sistema inmune y tratar la infección por Cándida (hongo que puede afectar la piel, la boca, el esófago, la vagina y otras zonas del cuerpo).
• Disminuir la sintomatología asociada a la enfermedad inflamatoria intestinal (Enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerosa) y al colon irritable.
• Normalizar la glucemia en personas diabéticas.
• Reducir los niveles sanguíneos de colesterol “malo” (LDL).
Otra importante razón para incorporar productos fermentados a nuestra dieta es que durante la fermentación ciertas enzimas presentes en los alimentos comienzan a desdoblar los macronutrientes (carbohidratos, grasas, proteínas) en moléculas más pequeñas. Como resultado, los alimentos fermentados son más fáciles de digerir y reducen las molestias digestivas, tales como hinchazón, dolor de estómago y flatulencias.